La modelo, que tuvo que ser intervenida de urgencia el pasado lunes 8 de octubre, ha experimentado una recuperación muy rápida tras serle extirpado un tumor que tenía en el estómago.
Sin duda, la vida de Marisa Jara ha dado un giro de 180 grados de un día para otro. Mientras se hacía unas pruebas ginecológicas le descubrieron un cáncer de tamaño considerable pegado al colon, teniendo que ser operada de urgencia el pasado lunes 8 de octubre. Fue dos días mas tarde cuando la propia modelo se manifestó sobre ello a través de sus redes sociales: "Ahora falta esperar que analicen el bicho", bromeaba. Dos días más tarde volvía a compartir otra fotografía en su cuenta de Instagram todavía desde la cama del hospital, pero las palabras que le acompañaban eran realmente alentadoras para todo sus seguidores: "A pesar del dolor que me están controlando con los calmantes, parece que voy mejorando porque me acaban de poner la cena después de 4 días sin comer", aseguraba. A estas palabras le acompañaban también otras con las que agradecía a todos sus fans por todos los mensajes de cariño que estaba recibiendo.
Y de nuevo el domingo 14 de octubre, aún sin cumplir una semana desde la intervención quirúrgica, la modelo volvió a su cuenta de Instagram, esta vez para compartir una fotografía suya, un selfie en el espejo de cuarto de baño con la camiseta levantada enseñando la importante abertura que tuvieron que hacerle en la barriga para poder extirparle el tumor: "Quería deciros a tod@s que estoy muy contenta y feliz porque ya no tengo tantos dolores y me voy recuperando poco a poco y que me hacéis llorar de emoción por el cariño tan grande que me dais", escribía.Visiblemente recuperada
La fotografía también muestra la rápida recuperación que está experimentando Jara, ya que, a juzgar por las dimensiones de la cicatriz, que esté de pie sin sufrir muchos dolores es todo avance: "Es maravilloso sentir tanto amor incluso de gente que no conoces", y hasta sigue bromeando con lo ocurrido: "¿Cómo no me voy a curar con la fuerza que me dais? ¡La cornada de la tripilla es lo de menos!".