Aunque Vargas LLosa no tenía ninguna fractura, sí que sufrió un leve traumatismo craneoencefálico que los doctores querían controlar para evitar problemas mayores. Además, al peruano le salió un hematoma enorme en la zona del glúteo izquierdo como consecuencia del tremendo golpe que se dio al precipitarse contra el suelo de su casa.
No es de extrañar que Vargas Llosa se haya recuperando tan rápido del golpe si se tiene en cuenta que el Doctor Carlos Martí Lopez-Amor ha sido uno de lo que lo ha tratado. Este facultativo cuenta con años de experiencia en la medicina y ha sido el encargado de atender a otras personalidades importantes, como por ejemplo el mismísimo Rey Juan Carlos. Después de recibir el alta, Isabel Preysler y él abandonaron juntos el centro médico para regresar, por fin, a su casa.
Amargo final de viaje
De seguro que ya tenían muchas ganas de volver a su hogar, ya que el accidente se produjo justo después de que Vargas Llosa y la socialité regresaran de un viaje a las Islas Canarias. Últimamente la pareja aprovecha cualquier hueco en sus agendas para hacer una romántica escapada. A mediados de mayo, los dos volaron hasta Miami para disfrutar de uno de los conciertos del hijo de Preysler, Julio José Iglesias, pero su regreso a España fue mucho mejor de lo que ha ido esta vez.