María Pombo fue nombrada por la revista Forbes como una de las 100 influencers más importantes en España. Un título que tiene muchas cosas buenas -como bien ella muestra a través de sus redes sociales-, pero también cosas malas -que tiene mucho menos espacio en sus perfiles-. Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental -que es el 10 de noviembre -, la madrileña concedió una sincera entrevista al también influencer Luc Loren en su canal de Youtube para hablar sobre este mismo tema.
Pombo no ha dudado en comenzar reconociendo que, pese a todo lo que pudiese contar a lo largo de la entrevista, se sentía "muy afortunada" por cómo era su vida y por todos los privilegios de los que disfrutaba. Pero, más allá de todo esto, la influencer ha confesado que lleva un tiempo "con más ansiedad de lo normal". Como le ha pasado a muchas personas, el confinamiento no fue algo fácil de llevar para ella. Un hecho al que también se le sumaron "varias noticias" que hicieron que esa ansiedad fuese todavía mayor.
Una de esas noticias fue cuando le diagnosticaron esclerosis múltiple, la misma que padece su madre desde hace 30 años. "Cuando empecé a tener síntomas deseé que fuese esclerosis y no otra cosa", le confiesa al también Dj: " Me dijeron que era esclerosis y respiré. Respiré porque no sabía si era un cáncer o algo que no he vivido ". María Pombo quiso reconocer de nuevo que tras recibir el diagnóstico ha seguido viviendo tranquila a pesar de que también tiene sus momentos de bajón. Pero lo tiene claro: "Es una enfermedad que no te mata, pero mueres con ella". Un hecho negativo que rápidamente pasó a un segundo plano cuando, poco después, recibió la noticia de que estaba embarazada: " Es la razón para no pensar en la parte negativa de mi vida ".
"No me parece algo de lo que tengas que estar avergonzado"
Unos sentimientos negativos que no suele hablar públicamente ante los miles de seguidores que tiene en las redes porque, dada la situación privilegiada que considera que tiene, cree que nadie se va a tomar en serio sus problemas y que incluso puede recibir todavía más comentarios negativos por ello: " Siento que no puedo decir las cosas tal cual porque la gente aprovecha para incitar a que me vaya peor ", confiesa en el vídeo.
Fue a raíz de esto mismo que María Pombo confesó algo que se desconocía sobre su vida personal: lleva un año acudiendo a un psiquiatra. Todo ocurrió cuando se vio desbordada por los mensajes que recibía a través de las redes sociales que, más allá de las críticas, algunos llegaban incluso a ser amenazas: " Me mandaron comentarios como: 'Tu madre se merece la enfermedad que tiene', 'Ojalá te muerdas' e incluso llegaron a mandarme mi dirección y decirme: 'Prepárate porque te van a pasar cosas '". Realmente unas palabras que ponen la piel de gallina a cualquiera.
Pero a pesar de que algunos de sus seguidores -o haters- llegaban incluso a amenazarla con hacerle cualquier cosa, lo realmente duro para la influencer fue leer las palabras contra su propia madre. Cuando lo leyó no pudo contener las lágrimas y pasó un buen rato llorando en su habitación: " Entró Pablo y me dijo: 'No puedes llegar a este punto' ", y fue entonces cuando decidió buscar ayuda psicológica. A pesar de que nunca había hablado de esto públicamente, la joven asegura que esto no es algo "de lo que tengas que avergonzarte".