María José Campanario está de enhorabuena y por fin ha visto uno de sus sueños cumplidos. La mujer de Jesulín de Ubrique está al cien por cien después de los problemas de salud que ha tenido y ha vuelto a su puesto de trabajo como odontóloga, aunque esta vez está más que feliz porque está trabajando en una clínica dental muy cercana a su casa.
Así lo ha hecho saber Jaleos, después de que llevara meses yendo desde su urbaniación Arcos Gardens Country Estate de Arcos de la Frontera en Cádiz hasta Sevilla capital, donde trabajaba en una clínica en el barrio de Los Remedios. Fuentes cercanas al medio también han detallado que este cambio había sido muy buscado con ella y más teniendo en cuenta su estado de salud.
"Lo de Sevilla le venía muy mal. Su intención es dejarlo porque es una pasada. Quiere dedicarse a la odontología infantil y que su puesto de trabajo esté más cerca de casa", dijo una fuente cercana a Jaleos. Llegar hasta su trabajo eran unos 180 kilómetros diarios, sumando casi tres horas montada en el coche.
Ahora María José Campanario está muy fuerte y además feliz, porque podrá pasar más tiempo con su marido y con sus hijos. La clínica en la que ha conseguido trabajo está a menos de 10 kilómetros de su casa, ha viajado hasta dos veces a Barcelona en este mes de abril para recibir un curso en el Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de la mano del prestigioso doctor Newton Fahl, por lo que su formación es exquisita.
Poco a poco
En cuanto a su salud, lleva desde 2005 sufriendo fibromialgia, una enfermedad crónica caracterizada por fuertes dolores en los músculos y en los huesos. Desde ese momento sus ingresos han sido continuos, y ha estado en clínicas ubicadas en Málaga, Sevilla y Cádiz, todo por ver algún resultado. Fue en septiembre de 2015 tras sufrir un accidente en la bañera de su casa cuando se supo de la enfermedad que sufría.