María Jesús Ruiz está viviendo un momento muy feliz en su vida debido al nacimiento de su segunda hija, a la que han llamado como ella, fruto de su relación con Julio Ruz. Para ambos es su primer hijo en común, pero de forma separada ellos ya tenían hijos por lo que no son padres primerizos. Su relación va viento en popa a pesar de los problemas con la justicia del empresario, porque se apoyan mutuamente.
La que fuera Miss España ha realizado una exclusiva en Diez Minutos presentando a su hija en unas tiernas fotografías acompañadas de su padre, Julio Ruz. La pareja está inmersa en la reforma de su casa de Andújar, en Jaén, y hasta que no esté terminada están en un hotel de Medina del Campo. "Ha sido una niña muy deseada. Estábamos eufóricos de amor cuando la concebimos", explica la Miss España.
El momento en el que María Jesús Ruiz vio la carita de su hija no pudo evitar emocionarse: " Lloré como una magdalena. No paraba de decir: ¡mi niña, mi niña! Fue muy emocionante porque apenas salió la cabecita me la pusieron en el pecho y fue un momento especial". Su hija Alba se quedó en shock al ver a su madre con otro bebé pero asegura que ahora adora a su hermana pequeña.
Sobre Julio Ruz todo son palabras buenas: " Julio es padrazo. No solo me ayuda a cambiar los pañales, se despierta conmigo cuando le tenemos que dar de comer y me apoya en todo. De hecho, él fue quien le dio el primer baño". Sin embargo, sobre Gil Silgado las palabras ya no son tan buenas: "Los procesos judiciales que tenemos están en los tribunales, supongo que para septiembre sabré más". Además, ha asegurado que no la felicitó por el nacimiento de la pequeña.
Julio Ruz, un padre entregado
El empresario está muy feliz con el nacimiento de su hija, a pesar de que sea su sexto hijo: "Con la misma ilusión. Cada hijo llega en una etapa diferente, pero todos te hacen feliz". Además, Julio Ruz estuvo en el parto apoyando a su pareja: "Corté el cordón umbilical. Eso me unirá a mi pequeña de por vida. Nunca lo olvidaré". Sin lugar a dudas están viviendo un momento de lo más feliz y pleno.