¡María García de Jaime y Tomás Páramo han sido padres de nuevo! La pareja de influencers forman ya oficialmente una familia de cuatro desde este mismo miércoles 7 de abril, día en el que llegó al mundo su segundo hijo, la pequeña Catalina de la Paz. Fue Páramo el que compartió la feliz noticia a través de sus cuenta de Instagram donde, horas antes, anunció ya que la pequeña estaba a punto de nacer con una fotografía de su mujer en el hospital.
Fue su su primer hijo en común, Tomi, el que escogió entre varios nombres para su futura hermanita. El elegido esconde detrás un importante significado: " Es el nombre de mi bisabuela ", confesaba María García de Jaime en una entrevista para ¡HOLA!, y supone un regalo muy especial también para ella: " Le haría muchísima ilusión que alguna bisnieta suya se llamara así y pudiera conocerla ", añadía Tomás Páramo confesando que, afortunadamente, la abuela Catalina iba a poder cumplir también su deseo de conocer a su bisnieta.
Quien también está muy ilusionado con esta nueva incorporación a la familia es el pequeño Tomás, el primer hijo de la pareja, que se ha convertido ya en hermano mayor. Como ellos mismos contaron en otro entrevista para el mencionado medio: " Siempre le decimos: 'Vas a tener que enseñar a Catalina un montón de cosas', entonces, está con mucha emoción ", aseguraba la influencer todavía en pleno embarazo.
La ilusión de Tomás por ser hermano mayor
Con 5 años de diferencia entre ellos, María García de Jaime confesó en varias ocasiones que este embarazo, pese a las circunstancias por la pandemia del Coronavirus, lo ha vivido mucho mejor y con más ilusión que el primero, cuando apenas tenía 19 años. " Con Tomi, queríamos que todo pasara rápido. El embarazo no fue la mejor época, la verdad, y este está siendo tan distinto. Hasta vestirme de embarazada me apetece ", reconocía.
En lo que no pensó mucho durante los últimos meses fue en cómo sería el gran día y el nacimiento de su pequeña. " No me gusta hacerme muchas expectativas ", confesaba en otra entrevista mientras esperaba a convertirse en mamá de nuevo. "Yo lo dejo todo en manos de Dios, y cuando veo que voy a pensar en ello más de la cuenta, rezo y me tranquilizo. Rezar me da paz", reconocía.