La actriz ha compartido una imagen de cómo está su cuerpo tras haber tenido a su tercera hija una semana antes.
Poco después de que María Castro volviera a ser madre de su tercera hija, a la que ella y su marido han llamado Emma, ha quería enseñar la realidad de este parto, compartiendo una imagen de su cuerpo a través de las redes sociales. "Una semana después... y no, no hay más pasajeros a bordo... aunque Olivia siga acariciando la tripa dulcemente mientras le susurra 'bebé'. Creo que por momentos olvida lo que acaba de pasar, mientras el resto del tiempo la vigilamos de cerca tratando de mantener a Emma 'con vida' jajaja tras uno de sus arrebatos de amor, como hermana mediana que ya es", ha comenzado diciendo.
En cuanto a su cuerpo, esta es la reflexión que ha hecho, diciendo: "A algunos la foto no le parecerá estética, a otros incluso innecesaria... Mientras, yo solo veo belleza, magia y una necesidad de gritarle al mundo que normalizar las situaciones, nos hace a los demás vivirlas con más mesura, tranquilidad y asumiendo que 'todo pasa'. Ojalá mi red social, y mis pequeñas aportaciones, sirvan para darle aliento a alguien... con una persona, ya me daría por satisfecha!". La actriz siempre ha sido muy natural a través de su cuenta de Instagram, y en esta ocasión no iba a ser de manera distinta. A lo largo de todo su tercer embarazo ha ido contando cómo lo ha llevado, contando su realidad teniéndose que pinchar a diario heparina. Por otro lado, ha estado prácticamente al pie del cañón casi hasta el final del embarazo trabajando en la serie 'La promesa' y contando con el apoyo incondicional de su equipo y compañeros, algo que ha hecho que para ella todo sea más fácil.
Ahora que tiene a su tercera hija en sus brazos, se encuentra en una nube de felicidad, pero no todo es de color de rosa como ha expresado. Ha vivido una crisis de lactancia y tiene que lidiar con la efusividad de su hija mediana con su hermana pequeña sin tener que quitarle el ojo. Una familia de cinco
A su salida del hospital cuando recibió el alta tras dar a luz, dijo: "Me encantan los niños, es lo que mejor sé hacer, ni las secuencias ni nada. Lo principal, además de recuperarme, es cuidar que no haga nada. Que no le corte las uñas, le maquille o le haga algo marciano", dijo entre risas. Ella y su marido han formado la familia que deseaban, enfrentándose a una nueva etapa siendo cinco en casa.