Recién firmada la ratificación del divorcio del que fue su marido durante casi veinte años, Javier Merino, la modelo asegura que ha habido cordialidad, sinceridad y buen rollo en todo este asunto: "Con Javier Merino hay sinceridad y buen rollo".
Ambos no tienen nada que reprocharse ni echarse en cara, y menos con el vínculo que tienen en común: sus cuatro hijos, frutos del amor que existía entre ellos. Además presume de haber estado "casada con un señor" y afirma que esta Navidad será diferente, que ya no celebrarán las fiestas como un matrimonio y cuatro hijos, lo harán por separado repartiéndose los días.
Mar Flores: "Soy una mujer divorciada, independiente y ya tengo una edad para no dar explicaciones"
Parece que en la pareja todo va viento en popa hasta el punto que se está barajando la posibilidad de que él se mude muy pronto a Madrid para poder pasar más tiempo juntos, algo en lo que Mar no ha querido entrar: "Soy una mujer divorciada, independiente y ya tengo una edad para no dar explicaciones. En esta ocasión se abre una puerta donde me voy a comportar como siempre he querido. Quiero mantener la privacidad, lo que veis y lo que vais a ver es lo que hay".