El diestro fue alcanzado por el astado de la ganadería Jandilla, que le empotró contra las tablas. Sin embargo, El Cordobés se mantuvo en la plaza hasta que dio muerte al animal. En ese momento el torero salió del ruedo con toda la grada ovacionándole y se dirigió por su propio pie hasta la enfermería.
Tras ser revisado en la enfermería de la plaza de toros, los doctores emitieron un parte médico en el que decía que el torero sufría "traumatismo cerrado en hemitorax izquierdo con fractura costal (costillas inferiores) y hematoma torácico". Además, decidieron que era mejor enviarle al hospital de Baza para que le hicieran un estudio radiológico y establecieran el alcance real de las lesiones que había sufrido.
El torero cumplió con su labor hasta el final
Tras este susto en la plaza, el resto de la corrida quedó en manos del rejoneador Andy Cartagena y del matador de toros Juan José Padilla. Ambos fueron los encargados de poner el broche de oro a esta tarde de toros granadina.