Josep Maria Mainat ha vuelto a la Audiencia de Barcelona, donde su exmujer Angela Dobrowolski está siendo juzgada por un delito de revelación de secretos y otro de intento de asesinato. El productor ha tenido un gesto inesperado al retirar la acusación por el primero de ellos, el delito más leve de revelación e secretos en comparación al otro. "Me ratifico", ha dicho frente al tribunal de la Sección 20. Poco antes su abogada Olga Tubau había entregado un escrito firmado por Mainat para confirmar el perdón a su exmujer.
Angela Dobrowolski acudiendo a los juzgados de BarcelonaMientras, Dobrowolski estaba acusada por este delito tras haber accedido al correo electrónico de él cuando era su marido, reenviándose los mensajes que este se había intercambiado con sus abogados sobre el proceso de divorcio y sobre su testamento. La Fiscalía pedía para ella 3 años de prisión y la acusación particular uno.
Ahora que ha sido retirada la acusación por revealción de secretos, se enfrenta a 13 años de prisión por presuntamente haber inyectado insulina a su exmarido durante la madrugada del 23 de junio de 2020 con el fin de acabar con su vida. En su defensa ha dicho que Mainat sufrió una hipoglucemia severa mientras dormía y que lo socorrió lo mejor que pudo: "Hice todo lo que pude para salvarle la vida".
Josep Maria Mainat saliendo de los juzgados tras prestar declaraciónAdemás, ha indicado que encontró a Mainat al borde de la muerte, por lo que decidió despejarle las vías aéreas, darle un sobre de glucosa concentrada para ciclistas y llamar a Emergencias. "Yo le presté atención y mientras tanto él se estaba muriendo", ha dicho mientras lloraba, insistiendo en que no quería verle muerto pese a que se arrepienta de muchas cosas de su matrimonio. Lo que sí ha reconocido es que tuvieron el día anterior una fuerte discusión.
Ha hablado de su adicción a las drogas
Después de que ella se enfadara porque descubrió que había presentado los papeles del divorcio, se calmaron, cenaron con sus hijos y se fueron a dormir. Por otro lado, ha apuntado a que estaba desvelada por su adicción a las drogas, algo que se pudo ver en las cámaras de seguridad: " Cogí el hábito y el patrón de que cuando estaba mal huía de casa y me 'colocaba', pero yo no quería perder a mi familia, quería quedarme en casa. No era raro que yo estuviera 'colocándome' y de puntillas, para no despertar a mis niños y a mi marido". Poco después ha asegurado que se encontró a Mainat en mal estado: "La habitación estaba oscurísima y oí ronquidos que no son normales, así que cogí el móvil y miré qué estaba pasando, quién de mi gente estaba haciendo estos ronquidos, cuando veo que Josep Maria estaba al borde de la muerte ".
