La polémica en la vida de la reina del pop sigue avivándose a través de los escándalos de la artista. La cantante Madonna, que ocupó todas las portadas de los medios de comunicación debido a su última intervención en su concierto en Australia, donde enseñó el pecho de una fan menor de edad, ha vuelto a la carga inmersa aún en el tema. Al parecer, esta seguidora incondicional de la reina del pop se vio sumergida en una lluvia de fortuna tras ser elegida por Madonna para subir al escenario y ser tocada por su ídolo musical, sin embargo no dio nada de importancia al hecho de que su cantante favorita le enseñara a todo el público su pecho tras bajarse su corsé.
No satisfecha con su experiencia en el concierto de Brisbane, la joven australiana ha viajado hasta la ciudad de Sydney para acudir nuevamente a un espectáculo de la reina del pop. Además la chica que ha sido conocida mundialmente por ser la fan a la que Madonna enseñó un pecho, acudió al concierto de Sydney con el mismo corsé con el que asistió en Brisbane. Con ello y acompañada de su madre, la joven Josephine llamó la atención de Madonna con su asistencia.
"Querida Josephine... has vuelto, me alegra volver a verte" comentó la artista estadounidense en plena actuación al ver a su máxima seguidora. A pesar de lo ocurrido en su pasado concierto, Madonna no dudó en dirigirse a la madre de la joven fan señalando además un tatuaje enorme que la señora tiene en su pecho. Fascinada con lo acontecido Madonna comunicaba a viva voz a través del micrófono toda la conversación que mantuvo con la madre y la hija más famosas de Australia gracias al concierto de la cantante.
Fans, pase lo que pase
Un hecho que provocó en las seguidoras de la legendaria artista una fascinación que tan solo ha aumentado su fanatismo por la música de la cantante. A pesar de que este acontecimiento podría ser un acto ofensivo para cualquier otra persona, no ha sido el caso de esta joven y su madre, quienes se han tomado el hecho como un juego.