Lucía Villalón se covirtió en madre por segunda vez de un niño, pero antes de su nacimiento ya era consciente de algunas dificultades a las que juntos tendrían que enfrentarse tras su llegada al mundo. Pese a que su embarazo no ha sido un camino sencillo, ha encontrado las fuerzas suficientes para seguir adelante y pensar de manera positiva sobre lo que estaba por venir.
El pequeño fue diagnosticado en el vientre materno de una malformación, y en un principio incluso la periodista creía que iba a tener que ser intervenido mientras se gestaba en su interior, pero no fue así. Una vez ha nacido sí ha tenido que ser operado, y parece que de momento todo va bien. El niño ha tenido que ser operado con tan solo tres semanas de vida por un problema en los riñones.
Dos días después de la intervención, ella misma ha contado cómo ha ido la intervención. "El lunes operaron a Lucas del ureterocele y está bien. ¡¡Una cosa menos!! Ahora toca esperar a ver cómo evoluciona y si el riñón 'bueno' mejora... el riñón 'malo', el multiquístico, no funciona absolutamente nada", ha comentado.
Fue en una de las ecografías cuando a ella y a su marido les comunicaron que el bebé tenía un riñón multiquístico y un ureterocele, que es una inflamación en el fondo de uno de los uréteres. "El 'bueno' aún no sabemos cuánto o cómo va a funcionar... lo que sí sabemos es que no está perfecto y que también viene con problemitas en el desarrollo... ahora toca seguir siendo fuertes, esperar, confiar, ir haciendo pruebas y rezarle mucho a Dios para que ese riñón espabile y se ponga a trabajar", ha explicado, contando que sabe que esto es una carrera de fondo y que tienen que estar fuertes para lo que esté por venir.
Pese a ser un momento muy duro, Lucía Villalón y Gonzalo Melero lo afrontan con mucha entereza y sobre todo optimismo. " Y mientras tanto a ser positivos (aunque reconozco que a veces me cuesta demasiado...) y a disfrutar de esta cosa tan preciosa que tenemos (que esto sí que no me cuesta Jeje)", ha comentado junto a su bebé.
Dos experiencias parecidas
Lo cierto es que tienen experiencia en esto de enfrentarse a una situación delicada, porque también tuvieron que enfrentarse a los problemas de salud con los que nació su primer hijo, Diego. Al pequeño le diagnosticaron gastrosquisis, una malformación de la pared abdominal que provoca que los intestinos se desarrollen fuera del cuerpo. Todo ello lo supieron también durante el embarazo, y en cuanto nació también tuvo que ser intervenido en dos ocasiones, pasando un tiempo en la UCI. Tras un tiempo muy preocupados, el niño ahora crece fuerte y sano.