Lindsay Lohan ha perdido la libertad condicional por haber incumplido la pena que le había sido impuesta por el robo de un collar y por conducir bajo los efectos del alcohol. Así lo ha dictaminado la juez Stephanie Sautner de la corte superior del condado de Los Ángeles, obligando a la actriz a realizar trabajos forzados en La Morgue.
Asimismo, la juez ha confirmado que la actriz fue expulsada del centro para mujeres de bajos ingresos de Los Ángeles donde debía servir parte de su condena, hasta nueve veces, motivo por el cual fue arrestrada en el juicio.
Lindsay Lohan podría llega a pasar un año en prisión
Con un semblante frío y visiblemente afectada, la intérprete de 'Herbie a tope', que lucía para la ocasión un vestido blanco muy recatado, abandonó la sala esposada. Más tarde, su abogada procedió a pagar la fianza, fijada en 100.000 dólares para que Lohan pudiera recuperar su libertad horas después.
Aún así, la actriz deberá regresar a la corte el 2 de noviembre, la fecha de su próxima audiencia ante el juez y donde podría ser castigada hasta cumplir un año de prisión.
Lindsay Lohan tiene problemas con la justicia desde 2007, cuando fue detenida por conducir ebria, un caso que se fue complicando debido a sucesivos desplantes de la intérprete, que falló a la hora de cumplir con las órdenes judiciales. Asimismo, exigió que Lohan, en caso de pagar la fianza, realizará 16 horas de servicio comunitario hasta la próxima sesión de la corte.