La actriz no puede evitar la polémica ni meterse en líos, pues aunque no se cansa de repetir que ha cambiado, sus acciones contradicen sus palabras.
Lindsay Lohan ha vuelto a las andadas. La joven actriz fue detenida en Nueva York la pasada madrugada después de que presuntamente atropellara a un peatón cuando conducía el vehículo de alta gama de su propiedad.
Como señala Daily Mail, la actriz se disponía a aparcar cuando golpeó con su coche la rodilla de un hombre de en torno a 30 años. La joven no se bajó, sino que fue una de las personas que viajaban con ella quien salió para comprobar que no hubiera daños en el vehículo. Sin preocuparse de la persona atropellada, Lohan salió del club hacia las 02:30 horas, momento en el que fue detenida por la policía. Los agentes fueron avisados por el hombre herido, que al parecer tuvo que ser hospitalizado.
Lindsay Lohan niega el atropello
Sin embargo la versión de Lohan que recoge TMZ es totalmente diferente, pues ha negado que tuviera constancia de haber atropellado a alguien, y que solo se dio cuenta de que algo había pasado cuando fue arrestada. También ha desmentido que su amigo se bajara del coche como la señala la versión del herido.
En ese sentido Lindsay Lohan se siente víctima de una trampa, de un montaje para desacreditarla aprovechando la mala imagen con la que cuenta y que se ha forjado en los últimos años a base de escándalos con robos y condenas de cárcel incluidas.