Poco se ha vuelto a saber sobre Liberty Ross y Rupert Sanders después de la infidelidad del director de 'Blancanieves y la leyenda del cazador' con Kristen Stewart a principios de verano. En un comienzo se habló de la posibilidad de divorcio, pero pronto se habló de que el matrimonio se había dado una segunda oportunidad, aunque nunca lo confirmaron.
Liberty Ross no se esperaba en absoluto la traición de su marido y, menos aún, con quien fue también su compañera de reparto en esta misma película. Un engaño de este tipo y encima tan público no es fácil de afrontar, especialmente estando casada y con dos hijos fruto de ese matrimonio.
A pesar de ser perseguida por los paparazzi e intentar averiguar la evolución de esta pareja, se han mantenido bastante al margen de la vida pública. La infidelidad causó mayor revuelo dado que Kristen Stewart mantenía a su vez un noviazgo con Robert Pattinson, por lo que este intercambio de parejas ha estado en el punto de mira desde que saltó a la luz.
Liberty Ross se sincera en un vídeo
La modelo continuó con su carrera como modelo y tuvo la oportunidad de desfilar para Alexander Wang en la Fashion Week de Nueva York el pasado mes de septiembre. Por fin ha llegado la hora y ha roto su silencio hablando en un vídeo con este diseñador sobre lo ocurrido.
''Creo que todos hacemos viajes y que recibimos lecciones en ciertos momentos de nuestras vidas. A veces, cuando las cosas pintan realmente mal, tienes que ser capaz de ver lo bueno y aprender de ello, y simplemente seguir adelante lo más feliz posible'', explica Liberty cargada de energía y entereza.
Sin embargo no llega a aclarar del todo qué ha ocurrido con su matrimonio ni si ha perdonado definitivamente a su marido, con declaraciones del tipo: ''Este año fue el final de algunas cosas y el principio de otras. Los comienzos y los finales son siempre emocionantes. Tengo un equilibrio muy bueno. Estoy feliz con mi vida. Tengo suerte. Me rodeo de buena gente''.
Además, a mediados de septiembre fue vista saliendo de una fiesta en Londres agarrada de la mano de un hombre del que se desconoce su identidad.