Todo surgió cuando durante la entrevista el actor explicó que hace 40 años una amiga suya fue violada, y tras conocer que el agresor había sido una persona de raza negra reconoció: "Empecé a recorrer la zona con un bate, esperando ser increpado por alguien, y esto lo digo con vergüenza. Hice eso hice al menos durante una semana esperando que un negro bastardo - el actor inglés hizo con sus manos el gesto de las comillas - saliera de algún bar, me provocara por algo... y así yo pudiera matarlo".
Estas declaraciones no fueron un plato de buen gusto ni para los espectadores ni para muchos medios que rápidamente tacharon de racista al actor. Tan solo unos días después el actor pidió disculpas por las declaraciones que había hecho, pero al no sentirse del todo en paz consigo mismo, el actor pocas semanas después ha vuelto a pedir disculpas, esta vez de manera oficial a través de un comunicado que dice:
Sinceras disculpas
"Durante las últimas semanas reflexioné y hablé con muchas personas que se sintieron heridas por mi impulsiva forma de narrar la brutal violación que sufrió una amiga cercana hace casi cuarenta años, y mis pensamientos injustificados y reacción frente a ese crimen. El infierno por el que pasó mi amiga detonó pensamientos irracionales que no me representan. Al intentar expresar lo que sentí en ese momento, perdí de vista el eje. Me equivoqué al hacer lo que hice. Reconozco eso, y aunque los comentarios que realicé bajo ningún punto de vista me reflejan a mí ni a mis pensamientos, igualmente fueron dañinos. Pido mis más sinceras disculpas".