"Estoy muy feliz", ha escrito junto a una serie de vÃdeos en los que cuenta cómo ha sido su experiencia. La hija de Kiko Matamoros llevaba tiempo queriendo modificar el aspecto de sus mamas tras su anterior operación. Con los cambios fÃsicos que ha sufrido en los últimos años, estaba muy descontenta con cómo las tenÃa, asà que, tras atreverse a dar el paso de volver a pasar por quirófano, está muy feliz, y aún más tras apreciar lo bien que ha quedado.
Aunque la influencer sigue bastante hinchada, como bien ha señalado, se muestra muy ilusionada con el resultado y con lo rápido que se está recuperando. "En cuanto a proyección de la prótesis ya se va notando y me encanta, y de tamaño también se nota muchÃsimo. Y eso que sigo bastante hinchada como es normal", ha señalado. La recuperación tras una intervención de este estilo es larga y es necesario guardar un reposo muy estricto durante los primeros dÃas para evitar complicaciones, algo que Laura Matamoros ha seguido al pie de la letra y su esfuerzo ya muestra sus primeros resultados: "Está saliendo todo fenomenal y vamos muy bien en cuanto a cómo estoy cicatrizando, cómo estoy respondiendo, cómo me está quedando...", ha explicado.
Una recuperación lenta
La hija de Kiko Matamoros ha querido explicar qué le ha motivado a tomar la decisión de modificar su aspecto. A través de sus redes, confesó a todos sus seguidores que "no estaba cómoda" con cómo habÃan quedado sus anteriores prótesis tras los dos embarazos y los cambios de peso que ha sufrido. También ha indicado que, al tratarse de unas prótesis que no estaban colocadas bajo el músculo, habÃan cedido más de lo que le habrÃa gustado, lo que le habÃa provocado tener "el pecho más caÃdo de lo normal". Como consecuencia, Matamoros ha confesado que eso le ha condicionado mucho a la hora de vestir por los complejos derivados de su cambio fÃsico.