La pareja ha hablado en profundidad cómo es compartir hogar, sacando al descubierto qué es lo peor de su convivencia.
Laura Escanes y Risto Mejide se ha convertido en uno de los matrimonios más consolidados del panorama nacional, a pesar de que en un primer momento apenas nadie apostaba por su amor. Los dos son papás de una niña llamada Roma, y junto al hijo que él tenía de una relación anterior han conseguido formar una familia. Pero la pregunta sobre un nuevo embarazo siempre rodea a la influencer, quien hace días aclaró si volverá a ser mamá pronto.
"No entra en nuestros planes ahora. ahora los dos estamos inmersos en muchísimos proyectos profesionales y no es el momento", decía ella en sus redes sociales. Ahora en 'Cariño, ¿pero qué dices?', el podcast que tienen en común, han hablado de una manera sincera de la parte menos bonita de su relación, sobre todo de algunos aspectos de su convivencia. "Conocer a alguien y quedarse con ese alguien consiste en que te gusten cosas que realmente no te gustarían", ha dicho Mejide, dejando claro que la convivencia no es fácil en ninguno de los casos. "Yo ya le he encontrado el punto a que jamás, nunca, en siete años, no hayas cambiado el rollo de papel higiénico", decía él bromeando, a lo que ha contestado ella: "Pero qué falso eres".
Y es que parece que el matrimonio ha conseguido limar sus asperezas en el día a día, aceptando los fallos o defectillos del otro. Aunque la cosa no se ha quedado ahí, porque él ha seguido sacando de quicio a su mujer, contando algunos de sus comportamientos: "No apretar el tubo de la pasta de dientes por donde toca", y ella se ha defendido: "Lo más lógico es apretar el tuvo por donde más pasta hay".Rocecillos típicos en la pareja
De esta manera sus seguidores han podido conocer un poco más a fondo cómo es su matrimonio y cómo se comportan en la intimidad. Está claro que tienen rocecillos típicos, algo que se puede subsanar y tolerar dentro de una relación y que no se escapa de la normalidad. Mientras tanto, están aprovechando a tope sus vacaciones, y es que los dos han disfrutado de uno de sus lugares preferidos: la isla de Menorca.