Tras el nacimiento de la primera hija de Laura Escanes parece que se ha querido tomar un respiro desde que fue mamá, por eso publica menos cosas ya que está pendiente de su bebé todo el día, sin embargo, parece que esta actitud no gusta nada a algunos seguidores, que no han dudado en enviarle mensajes echándole esto en cara.
Risto Mejide y Laura Escanes junto a su primera hija, RomaEl mensaje que le ha echado en cara este hecho tenía relación con las protestas y acciones violentas que están teniendo lugar sobre todo en Barcelona a favor del independentismo. Uno de los mensajes decía así: Tu espabila en dar tu opinión al respecto todo lo que está ocurriendo, porque es muy inteligente (perdona no mojarse) y estar en casa tranquilita sin decir ni muuu por no perder seguidores o dinerito".
La influencer no ha dudado en contestar, diciendo: "Estoy más bien no tranquilita en casa con una bebé de 15 días, que no es fácil. No podemos obligar a que otra gente se pronuncie o no. Si queremos lo haremos, si no, no. Es eso la libertad de expresión. Sentirnos obligados y leer estos mensajes no lo es".
Pero su mensaje no se ha quedado ahí, porque ha seguido diciendo: "Y no, el dinerito o los seguidores no son el motivo por el que no digo nada. Otras veces me he pronunciado y he perdido seguidores, pero me da igual. Si lo hago es porque quiero hacerlo. Esta vez a parte de estar bastante desconectada de redes desde que nació mi hija, el dolor que me provoca ver según qué cosas en Barcelona prefiero llevarlo por dentro y no decir nada. Cada uno decide lo que hacer en sus redes. Por suerte, la situación no depende de mí. Quién debería hablar son los políticos, no los influencers. Buenos días". Así en un momento en el que está centrada en su hija Roma, prefiere no tener ningún tipo de vínculo con la política.
Enamorados de su hija Roma
Mientras tanto el matrimonio está disfrutando al máximo de una etapa tan bonita como son los primeros días de vida de un bebé. El televisivo ha compartido una foto en su cuenta de Instagram en la que la pequeña Roma aparece tumbada en su pecho, sin embargo, igual que su mujer, procuran no mostrar prácticamente nada de la carita de la pequeña, que prefieren que sea anónima a pesar de que ellos dos son personajes públicos.
