El fallecimiento de Cristina La Veneno, la que fuera musa de Pepe Navarro, ha estado rodeado de polémica del principio al final, final que todavía no ha llegado. Su muerte a causa de un fuerte golpe en la cabeza no ha convencido a sus familiares que están convencidos de que alguien acabó con su vida.
La autopsia desveló que la causa del fallecimiento de La Veneno había sido un accidente doméstico, algo que no convenció a sus más allegados. Cuando estaba todo preparado para el entierro en su pueblo, algo que ella no hubiera permitido, se solicitó una segunda autopsia para confirmar que de verdad había sido un accidente. El resultado volvió a determinar lo mismo y la situación volvía a estar cual estaba antes.
Actualmente, las cosas siguen igual. La familia, que tuvo una relación tensa con La Veneno, sigue manteniendo su cadáver en el Instituto Anatómico Forense 28 días después de que se produjera su fatídica muerte. Sus hermanas estarían planteándose solicitar incluso una tercera autopsia que tendría un coste de 1.200 euros, ya que siguen sin estar conformes con los resultados que les dan.
Pueden terminar en la ruina
La lucha incansable de la familia por demostrar que La Veneno fue asesinada les puede salir muy caro y es que, según informa El Español, mantener el cuerpo de la artista en el Tanatorio Norte de Madrid cuesta 360 euros al día, por lo que la deuda alcanzaría ya casi los 10.000 euros. Además, su cuerpo se está deteriorando con el paso del tiempo y por la realización de varias autopsias. Por el momento no se sabe que ocurrirá con ella ni cuando podrá descansar en paz.