A Donald Trump no paran de salirle enemigos por todas partes. La última en sumarse a la lista ha sido Kristen Stewart, con la que ya tuvo un encontronazo hace algunos años. La joven ha decidido responder a los antiguos tuits que el ahora Presidente de los Estados Unidos publicó por aquel entonces y lo ha hecho en 'Saturday Night Live'.
Stewart, que actualmente es pareja de Stella Maxwell, nunca ha hablado públicamente de su orientación sexual, pero en esta ocasión ha querido dirigirse a Donald Trump y decir alto y claro que es gay sin problema alguno. La joven ha comentado en alguna ocasión que no quería utilizar la palabra gay porque lo considera "una etiqueta reduccionista", pero por primera vez lo ha reconocido.
El problema entre ellos viene de tiempo atrás. Cuando salió a la luz que Kristen Stewart había sido infiel a Robert Pattinson con el director de 'Blancanieves y la leyenda del cazador', Rupert Sanders, se produjo un auténtico revuelo en todo el mundo. Trump decidió opinar sobre ello en redes sociales y no le dedicó precisamente buenas palabras a la actriz: "Robert Pattinson no debería volver con Stewart. Ella le ha tratado como un perro y lo volvería a hacer. Él puede hacerlo mucho mejor".
Otro de los tuits decía: "Todo el mundo sabe que tengo razón, que Pattinson debe deshacerse de Stewart. En un par de años, él me lo agradecerá. Sé inteligente, Robert". Ahora ha sido Kristen Stewart la que le ha respondido en 'Saturday Night Live': "Robert y yo rompimos y luego volvimos, y por algún motivo eso hizo que Donald Trump se volviese loco". La actriz continuó: "Para ser honesta no creo que Donald Trump me odie. Simplemente creo que estaba enamorado de mi novio".
Muy clara en su discurso
Kristen Stewart continuó con su discurso en el programa y no tuvo reparos a la hora de decir: "Sí, es una locura ¿verdad? El presidente no es precisamente un gran fan mío, pero eso está muy bien. Y Donald, si no te gustaba entonces probablemente no te guste ahora, porque estoy presentando 'Saturday Night Live' y soy tan gay, tío". Sin lugar a dudas, Kristen Stewart se quedó muy a gusto diciéndole al Presidente lo que pensaba y se sacó una espinita que tenía clavada desde hace algún tiempo.