Pero el que sin duda ha dado el campanazo ha sido el nuevo novio de la matriarca, Corey Gamble, de 33 años, que asistió en calidad de uno más de la familia. También suspuso una sorpresa no ver a la mayor de las Kardashian, Kourtney sin su marido y padre de sus hijos Scott Disick, que continúa recuperándose de sus adicciones.
Kim Kardashian acudió con Kanye West y la hija de ambos North West vestida al completo de blanco marcando como siempre sus curvas. Khloe Kardashian también acudió enfundada en una ajustada falda que dejaba ver los seis kilos que ha perdido. Kendall Jenner, por su parte, llegó con el novio de su hermana Kylie Jenner, Tyga y el hijo de éste King Cairo luciendo vientre con un top blanco poco apropiado para ir a misa.
Las últimas serán las primeras
Por último, pero no menos fotografiada, llegaba rezagada la pequeña de la familia, Kylie Jenner, que a conjunto con sus hermanas, iba con unos vaqueros claros de cintura alta y una camisa blanca.