La última vez que se veía a la pareja disfrutar de unas horas juntos era este pasado miércoles cuando Scott, de 32 años, y Kourtney, de 36, eran fotografiados a la entrada de un restaurante con su hija, Penelope. Sin duda, el hecho de que la mayor de las Kardashian haya vuelto a incluir en sus planes a quien fuera su pareja durante nueve años es algo merecedor de destacarse.
Luego de que Disick asegurara sentirse muy arrepentido por el comportamiento que había provocado, en muchas ocasiones, el enfado de Kourtney, y de aparecer en la foto de familia de ella por el día de Acción de Gracias, es ya un hecho que la pareja se ha reconciliado y que está luchando por sacar su relación a flote.
Reconduciendo su vida
Después de que Scott admitiera sus problemas y decidiera pedir ayuda profesional para tratar sus problemas con el alcohol, Kourtney afirma estar muy contenta por él. Según una fuente cercana, la mayor de las Kardashian está feliz de ver que, finalmente, su pareja está intentando de verdad mantenerse sobrio en todo momento y ser un buen padre para sus hijos.