La pareja formada por Kim Kardashian y Kanye West ha reflexionado sobre que no todo lo grande es mejor y ha decidido seguir preparando su boda de una manera muy íntima, según confesó Kim Kardashian a Ryan Seacrest en su programa de radio KIIS FM.
Tras meses de organización intentando ponerse de acuerdo con la fecha, el lugar de la celebración y los invitados, finalmente el enlace se producirá a finales de 2014 en París y se tratará de una ceremonia muy íntima con pocos invitados.
"A medida que avanzamos, nos estamos dando cuenta de que queremos que sea más pequeño y más íntimo de lo que la gente se imagina y piensa", declaró Kardashian, aunque sin especificar cuál es su concepto de algo pequeño.
Una familia feliz
En la entrevista, la celebrity habló sobre su maternidad, de la que se siente realmente orgullosa y asegura que su hija es lo más bonito de su vida. Comentó también alguna anécdota como que West se sentía realmente nervioso en el momento de la proposición de matrimonio por miedo a que Kim dijera que no.
Sin embargo, ella estaba segura de cuál sería su respuesta: "No sé cómo podía pensar en eso! Yo creo que en su corazón, él sabía que yo diría que 'sí'. Quiero decir, tenemos un hijo juntos, nos hemos amado el uno al otro durante un tiempo muy largo y creo que es el momento adecuado. "