A pocos días de que las celebrities se enfunden sus mejores galas para desfilar sobre la alfombra roja del Teatro Kodak de Los Ángeles con motivo de los Oscar 2012, la cita más importante del cine a nivel mundial, los famosos ya se preparan para dar el pistoletazo de salida a esta gran noche, en las fiestas previas.
Una de ellas fue la celebrada por QVC, a la que acudieron numerosos rostros conocidos, como fue el caso de Kim Kardashian. La socialité, enfundada en un vestido negro de cuello alto y mangas al descubierto, fue una de las pocas invitadas que escogió el color 'black' para la ocasión. Con un moño nada discreto, aros grandes y los labios en rouge, la celebrity, con un look muy original, posó orgullosa al lado de su madre Kris Jenner.
Stacy, sin George Clooney
Otra de las habituales en la 'red carpet' fue Stacy Keibler. Ataviada con un elegante vestido morado hasta la rodilla estilo bandage y espalda al descubierto, la novia de George Clooney deslumbró con su belleza natural y su simpatía.
Nicole Richie, una de las grandes ausentes en los últimos actos, puso la nota angelical al posar con un vestido en color blanco roto y corte palabra de honor con bordados en dorado. Con un corte de pelo más radical y un maquillaje soft, la que fuera amiga de Paris Hilton lució tipazo con este diseño a pesar de sus embarazos, demostrando que la maternidad no hace mella en ella.
Y de una madre involucrada con su familia, a otra que próximamente lo va a ser como Molly Sims, quien posó con un vestido largo de estampado floral luciendo su incipiente estado de gestación. La actriz, conocida por su papel de Delinda Deline en la serie de televisión 'Las Vegas', está radiante y pasea muy feliz su embarazo. No en vano, la intérprete ha visto felizmente su sueño de ser madre al lado de su marido, el productor de cine Scott Stuber.