Daily Mail ha hecho público que la información que compartieron no ocurrió y que la celebrity no intentó conseguir las invitaciones.
Kim Kardashian y Pete Davidson llegaban a Londres, algo que dejaba sorprendidos a todo el mundo, ya que su visita tenía lugar poco antes de que comenzaran las celebraciones por el Jubileo de Platino de la Reina Isabel II. Según compartía Daily Mail era precisamente este importante evento el motivo del viaje de la pareja, un deseo de asistir a las celebraciones que se veía frustrado.
Era el propio medio el que publicaba que la celebrity y el cómico habían solicitado asistir a la fiesta que se realiza en Palacio con motivo del Jubileo de la Reina y que su presencia había sido rechazada por los funcionarios de la Casa Real Británica. Sin embargo, Daily Mail ha publicado un comunicado en el que ha aclarado que, tras hablar con los representantes de Kim Kardashian, la información no era cierta."Cualquier esfuerzo por obtener las invitaciones en su nombre no se hizo con su conocimiento o aprobación", ha compartido Daily Mail, negando la información previa sobre el gran interés de la celebrity por conseguir la invitación para poder asistir al evento. Por tanto, a pesar de la visita a la ciudad, la intención de la pareja no sería acudir a la fiesta oficial.
Una fiesta privada que, según compartió el mismo medio, cuenta con un total de 10.000 invitaciones que se repartieron a través de una votación y el resto de las invitaciones al evento se repartieron para trabajadores de gran importancia para el país, como voluntarios de organizaciones benéficas y algunos de los miembros de las Fuerzas Armadas.Una celebración muy importante
El Jubileo de Platino de la Reina Isabel II está dando de qué hablar, no solo por la ausencia de la monarca en algunos de los eventos, sino también por las presencias reales que están acudiendo a las celebraciones. El regreso del Príncipe Harry y Meghan Markle a Reino Unido está en boca de todos, ya que se trata de la vuelta de los Duques de Sussex a un acto oficial después de más de dos años de su salida de la Familia Real Británica.