Kim Kardashian y Kanye West buscan ser padres por tercera vez. Para ello, según ha anunciado la web TMZ han decidido recurrir a un vientre subrogado por el que han desembolsado 45.000 dólares, ya que la hija de Kris Jenner padece placenta accreta, una enfermedad que consiste en una adherencia de la placenta a la pared uterina y puede poner en peligro la vida de la madre.
La publicación estadounidense también ha dado algunos detalles acerca de cómo serán las condiciones de contratación. En caso de gestación múltiple, la madre recibiría 5.000 dólares más por cada hijo, y por interrupción de la gestación en los primeros meses recibiría 4.000 dólares. Además, la pareja habría adelantando ya 68.000 dólares a la agencia de maternidad subrogada.
En el contrato aparecen también otras cláusulas que debe cumplir la mujer que geste el futuro hijo de Kim Kardashian como no beber, fumar o ingerir drogas mientras este embarazada. Tampoco podrá mantener relaciones sexuales durante las semanas previas al parto ni viajar en metro, beber cafeína o teñirse el pelo.
El matrimonio Kardashian-West
El matrimonio ya tiene a dos hijos: North y Saint West. Pero en esta ocasión la pareja, que contrajo matrimonio en una romántica boda en 2014, ha decidido dar prioridad a los problemas de salud de Kardashian que ya habían causado varias complicaciones en los anteriores embarazos.