Ya lo hizo su marido para pedirle matrimonio y ahora ella le ha devuelto la sorpresa por su 38 cumpleaños. Kim Kardashian alquiló un estadio para montar una gran fiesta a Kanye West centrada en el mundo del baloncesto, deporte que le apasiona al rapero.
Nada más y nada menos que el Staple Center de Los Angeles alquiló la celebrity para preparar un gran evento en el que no faltaron amigos conocidos como fue el caso de Justin Bieber, Kobe Bryant, Magic Johnson o Tyga, compañero de profesión de West a la vez que novio de Kylie Jenner.
Desde el arranque de la sorpresa Kim Kardashian mostró en sus redes sociales todos y cada uno de los pasos del gran día: vendó a su marido los ojos para conducirle hasta el estadio, donde descubrió que tenía un partido de baloncesto con amigos.
Pero antes de que el árbitro diera el pitido inicial, John Legend cantó el himno nacional -por supuesto más tarde entonó el 'Cumpleaños feliz'- y ya sí que los dos equipos -con James Harden y 2 Chainz como entrenadores- disputarol el encuentro.
El gran momento de Kim Kardashian y Kanye West: mucho que celebrar
Un partido en el que no había nada en juego más que pasar un buen rato entre amigos pero que era tan real que hasta había animadores contratadas por Kim Kardashian y con las que la parejita no dudó en hacerse la foto y colgarla en las redes sociales.
Así transcurrió una gran sorpresa que llega en un momento muy especial para la pareja. Acaba de celebrar su primer aniversario de boda, su hija North West está a punto de soplar las velas de su segundo cumpleaños y están esperando su segundo hijo -que, dicen las malas lenguas, podrían ser gemelos-.