Aunque estos días disfruta de la compañía de su hijo después de que el pequeño Francisco celebrara su segundo cumpleaños con Jessica Bueno y su familia materna, Kiko Rivera está viviendo unos días muy complicados en los que no puede ocultar la tensión existente.
Una situación muy difícil que el Dj quiere vivir en la más absoluta intimidad, por lo que no ha dudado en mostrar su enfado al ver cómo la prensa le persigue en busca de algún tipo de declaración sobre cómo se encuentra su madre.
Kiko Rivera no quiere ser el centro de atención de la prensa
Así, si Kiko Rivera ya mostraba su enfado cuando los fotógrafos captaban el momento en el que Kiko Rivera le devolvía a su hijo, ahora lo ha vuelto a hacer al ser preguntado a la salida de un local. "Dame una escopeta, verás que pronto acabo", decía mientras se dirigía a su coche junto a su novia Irene Rosales.