El flamenco y el mundo taurino se han dado la mano en este evento en el que se han donado algunos enseres de personajes ilustres del toreo : un capote de Cayetano Rivera, una muletilla de Francisco, unas manoletinas de Manuel Díaz 'El Cordobés' y un pantalón de El Juli, entre otros objetos.
Quienes quitaron todo el protagonismo al flamenco esa noche fueron Kiko Rivera e Irene Rosales, que se llevaron todos los focos al llegar. Tras los rumores de una supuesta crisis matrimonial, Kiko Rivera y su pareja han pasado unos días en Madrid relajándose en un SPA y han terminado de acallar los rumores de ruptura dándose un beso en el photocall del evento.
Kiko Rivera, callando bocas
Las malas lenguas decían que la relación era de conveniencia pero Kiko Rivera ha dejado claro que ellos no tienen ningún contrato y que su matrimonio no se basa en un pacto. Esta estancia en Madrid ha coincidido con la visita de Kiko Rivera a los Juzgados de Plaza Castilla a causa de un conflicto judicial que mantiene con Guille 'El invencible', que le acusa de haber registrado sin su autorizacion el tema 'Así soy yo'. El hijo de la tonadillera Isabel Pantoja se enfrenta a una multa de 359.000 euros y a una pena de cárcel de dos a cuatro años.
Kiko Rivera también negó su supuesta infidelidad con Olvido Hormigos. "Ella sabe muy bien que está mintiendo. Tanto Irene como yo sabemos cuándo le hemos escrito. Que diga lo que quiera". Lo cierto es que no hay evidencias de que existan esos mensajes de los que Hormigos habla y de momento, todo ha quedado en el aire.
También posaron para los medios Raquel Bollo, de quien habló Kiko Rivera y dijo que era su familia y que todo estaba bien y Kiko Matamoros con su mujer Makoke. Junto a ellos, el torero Óscar Higares y Elena Tablada.