Tras haber dado una exclusiva después de ratificarse la sentencia de su juicio con Belén Esteban, Toño Sanchís ha vuelto al photocall.
Tras haberse ratificado la sentencia por la que su empresa tiene que pagar a Belén Esteban alrededor de 600.000 euros y haber hablado vía exclusiva de cómo están viviendo todo este proceso -también a la espera de saber si iniciará algún tipo de trámite para tratar de seguir defendiendo su inocencia-, Toño Sanchís ha vuelto a la vida pública acudiendo a la fiesta del tercer aniversario de una conocida sala de fiestas de Madrid.El mánager llegaba con una gran sonrisa instalada en la cara que no quitó en toda la noche pero con muy pocas ganas de hablar con la prensa. Tras posar para los fotógrafos salió corriendo del photocall sin decir absolutamente nada de cómo se encuentra o de cómo va a hacer frente al pago a la de Paracuellos.
El que sí quiso hablar fue Kiko Matamoros, que le echó un cable. "No puede vivir angustiado porque haya perdido un juicio", comentó el excolaborador de 'Sálvame' defendiendo que pueda salir de fiesta y retomar su vida social sin ningún tipo de inconveniente.
Matamoros: "Creo que Belén tendrá dificultades para cobrar"
Además también ha querido comentar que no es él realmente el que tiene que pagar a la llamada Princesa del Pueblo, que es su empresa: "La mano que meció la cuna es posible, pero la responsabilidad civil no es suya. Toño es el que ha hecho la gestión. Legalmente está exento de responsabilidad de momento", comentaba poniendo también en duda que Belén Esteban vaya a cobrar todo lo que indica la sentencia: "Creo que tendrá dificultades para cobrar. Si el único bien es la casa que tiene un valor de 500.000 euros y una hipoteca de tres ciento y pico mil, ya me dirás qué va a pillar Belén Esteban".