Kiko Matamoros ya se está recuperando en casa de su operación en la que e quitaron un tumor en la vejiga. Después de que hicieran una biopsia a los tejidos extirpados, los médicos han concluido que no tenía cáncer, una buenísima noticia para el colaborador de 'Sálvame'. Así lo ha hecho saber a la revista Lecturas después de vivir un momento muy complicado.
A pesar de que haya decidido cambiar su estilo de vida, ha dicho: "Lo que no quiero es renunciar a vivir. La vida hay que disfrutarla ". Por suerte todo ha quedado en un susto, aunque tendrá que someterse a varios controles cada cierto tiempo. Él mismo ha contado cómo podría haber acabado todo: "Muchos tumores en esa zona suelen acabar con metastasis u otras complicaciones". Y en Telecinco ha dicho: "No me ha producido ningún tipo de daño en el intestino y no se ha producido el cáncer que se produce cuando evoluciona".
Kiko Matamoros y su novia Marta López asistiendo a un conciertoEn cuanto a cómo se han conocido los resultados, ha admitido que ha sido él el que se los ha hecho llegar a la revista y que lo hubiese gritado: "No me ha producido ningún tipo de daño en el intestino y no se ha producido el cáncer que se produce cuando evoluciona".
En todo este proceso ha estado a su lado Marta López, su novia, aunque antes de ser dado de alta se tuvo que marchar a Melilla para cumplir con sus compromisos profesionales. Eso sí, está deseando compartir casa con ella por lo que ha dicho en Lecturas: "Echo de menos un hogar cuando estoy con Marta. Por eso estoy ya mirando algo para irnos a vivir a un apartamento o un sitio donde estemos cómodos los dos y en el que tengamos más espacio que en el hotel". Tiene ganas de tener una vida más estable: " El hecho de vivir en pareja, estar las 24 horas juntos, pues ya te apetece cocinar, tener otros espacios, recibir a los amigos...", y decía: "La verdad es que el tiempo que he estado con ella en el hotel lo he disfrutado. Es una tía maravillosa".
