Parecía que el Coronavirus no era razón suficiente para que las hermanas Kardashian-Jenner dejasen durante un tiempo de lado sus famosas fiestas multitudinarias tras las polémicas celebraciones de los cumpleaños de Kendall Jenner y Kim Kardashian en plena pandemia y sin respetar las medidas sanitarias recomendadas. Aunque parece que, por fin, la familia más famosa de la pequeña pantalla estadounidense -no por mucho tiempo- ha entrado en razón y ha tomado la firme decisión de no poner en riesgo su salud y cancelar su tradicional fiesta de Navidad.
Fue Khloé Kardashian la que lo confirmó a través de su cuenta de Twitter respondiendo a las duda de una de sus seguidoras. " Los casos de Covid están fuera de control en Calabasas, así que decidimos no hacer una fiesta de Nochebuena este año ", era las primeras y contundentes palabras de la empresaria. Y es que ciertamente Estados Unidos en general y Calabasas en particular está sufriendo una segunda ola verdaderamente preocupante con unos datos totalmente desorbitados. La ciudad de Calabasas donde la hermanas Kardashian tienen sus enormes mansiones paso de tener casi 9 mil casos el 26 de noviembre a casi 29 mil el día 6 de diciembre, siendo esta la cifra más alta de contagios desde que se comenzaron a registrar datos a mediados del mes de marzo.
Esta es, sin lugar a duda, una importante decisión ya que ha significado poner en stand by una de las tradiciones más importante de la familia. Tal y como la cofundadora de Good American ha reconocido: " Es la primera vez que no vamos a tener una fiesta de Nochebuena desde 1978 ". A pesar de lo triste que esto es para ellas, lo cierto es que parecen estar todas bastante concienciadas con la gravedad de la situación. " ¡La salud y la seguridad es lo primero! Tomarnos en serio esta pandemia en serio es imprescindible ", terminaba diciendo.
Tampoco habrá posado navideño de la familia
Lo que tampoco habrá este 2020 es una postal navideña de todos los miembros de la familia aunque, pese a que esté el Covid de por medio, este tampoco habrá sido la mayor razón de peso para su cancelación. Para la historia de la televisión pasará la fuerte bronca que Kim y Kourtney tuvieron en la temporada 15 de 'Keeping Up With The Kardashians' por las dificultades de las hermanas de ponerse de acuerdo para la sesión de fotos de la postal de las Navidades de 2017. Este cara a cara acabó con un Kourtney llorando por las esquinas reconociendo que sentía vergüenza de pertenecer a una familia así mientras su hermana pequeña le hacía saber de muy malas formas que "era la menos interés despertaba de todas" y que, por ello, no había problema alguno en que no apareciese en la postal.
Aunque finalmente consiguieron sacar adelante esa sesión de fotos, lo cierto es que poco a poco esta tradición fue cayendo en el olvido hasta el punto de que la en 2019 Kim Kardashian acabó publicando su particular posado navideño con sus hijos y su marido sentados en las escaleras de su casa vistiendo todo una chándal gris. Un estética bastante alejada de la pomposidad que siempre tuvieron los posados de la familia. Eso sí, lo que no faltó fue el Photoshop ya que, posteriormente, la empresaria acabó reconociendo que su hija North West había sido pesada a posteriori porque en el momento de hacer la foto estaba de morros.