Keith Richards, conocido por sus excesos en bebidas alcohólicas y drogas, ha anunciado públicamente que ha dejado de beber. El guitarrista había sido detenido en varios ocasiones por posesión de drogas durante su carrera como componente de la banda. No obstante, aclaró que a veces se permite tomar una copa de vino o cerveza. "Me desenganche. Estaba harto. Era hora de dejarlo", ha comentado.
El guitarrista también mencionó que llevaba casi un año luchando con el alcohol. Sus compañeros también han notado un cambio en él tal y como agrega Ronnie Wood: "Estaba mucho más apacible. Es un placer trabajar con él, está abierto a más ideas".
Concierto de los Rolling StoneAdemás le ha mostrado todo su apoyo: "Si quiere mantenerse, estaré ahí, apoyándole". También, el artista aclaró que no solo era momento de dejar este vicio, sino todos los demás: "Es hora de abandonar" refiriéndose a su relación con las drogas.
Las cosas le van mucho mejor
Ronnie Wood, quién también luchó durante varios años con el alcohol, dijo que ahora era mucho más fácil trabajar a su lado. "Pienso que el Keith que solíamos conocer y amar llegó a ese punto en el que si tomaba uno más, se hubiera pasado de la raya y se hubiera vuelto desagradable. El punto se volvió más y más corto, ya sabes, y él se dio cuenta", agregó Wood. Los Rolling Stone tienen dispuesta su nueva gira por Estados Unidos, dando comienzo en Miami en abril de 2019.
