Katy Perry viajó a Australia después de anunciar su embarazo, y fue ahí donde dio conciertos y entrevistas a sus seguidores. Lo que ella no sabía era que iba a tener que suspender varios de esos eventos a causa de la propagación del coronavirus en el país, así como internacionalmente. Asimismo, la cantante volvió a Los Angeles tras pasar un día entero de cuarentena en su hotel de Sidney.
Al enterarse de que había varios casos en su sello discográfico, sus representantes decidieron cancelar todos los eventos en Australia. Por lo tanto, minutos antes de que Perry dejara el hotel, le avisaron de que debería quedarse en cuarentena en el mismo durante 24 horas. Esta es una medida que hay que llevar a rajatabla para evitar la propagación del virus.
Y es que el hotel donde se estaba quedando en la ciudad australiana, era el mismo donde habían estado Tom Hanks y su mujer, Rita Wilson, quienes posteriormente dieron positivo en la prueba del virus. Así que la cantante decidió encerrarse en su habitación hasta volver en el vuelo que tenía programado a Estados Unidos.
Por otra parte, su prometido, Orlando Bloom, estaría esperándola cuando esta volviera ya que también informó de su cuarentena. Anteriormente se encontraba en Praga grabando 'Carnival row' una serie para Amazon Prime. Sin embargo, debido a los múltiples casos de la pandemia, la grabación de la misma se canceló, haciendo que todos volvieran a casa.
Boda pospuesta
La pareja había planeado una boda en invierno de 2019, pero cambiaron la fecha anunciando que la ceremonia tendría lugar en junio de 2020 en Japón. No obstante, debido a la situación mundial a causa del Covid-19, estos se han visto obligados a posponerla de nuevo. Ahora les toca disfrutar de su embarazo intentando evitar por todos los medios el contagio de coronavirus.