El cantante Kanye West, que fue hospitalizado por agotamiento el lunes 21 de noviembre en el centro médico UCLA de Los Angeles ya ha sido dado de alta. El rapero se encuentra ya en su casa junto a Kim Kardashian y sus hijos después de ser diagnosticado de paranoia y de una profunda depresión.
Fuentes cercanas a la pareja aseguraron que Kanye West se estaba recuperando tras haber tocado fondo, y por ello los médicos han aconsejado que volviera a su domicilio con su familia.
También se ha podido confirmar que el rapero no tenía ni su teléfono móvil ni su ordenador el tiempo que ha estado ingresado. Los médicos le han aconsejado descansar, mantener la calma y poco a poco recuperar la normalidad. Su mujer le ha acompañado y apoyado en todo momento. El cantante ha pasado más de una semana hospitalizado, no aguantaba más y necesitaba volver a su rutina. Amigos cercanos a la pareja confirman que este suceso "ha sido un infierno para ellos". También han declarado que "el comportamiento de Kanye ha tenido un gran precio en su matrimonio pero que Kim se siente aliviada al recibir toda la ayuda que necesita".
La situación de Kanye West
"En el hospital ha estado muy paranoico y han estado constantemente vigilando su seguridad. Kim ha pasado horas con Kanye todos los días. Ella dice que toma muchos medicamentos diferente. ", confirma otra fuente a Daily Mail.
Durante su ingreso en el UCLA Medical Center, Kanye West pidió disponer de un equipo de música junto a su cama y de ver los diseños de su linea de zapatillas Adidas Yeezy. Todas estas peticiones fueron denegadas por el servicio médico. Además, su mujer le ha recordado que debía centrarse en mejorar y en descansar. "Kanye tiene ganas de trabajar. Pidió que le llevaran al hospital los aparatos electrónicos para así poder grabar en la cama ", confirma una fuente cercana al rapero a la revista Us Weekly. Evidentemente, todas sus peticiones fueron denegadas.