Justin Bieber vuelve a ser objeto de críticas por parte de la opinión pública. Y esta vez no es por fumar marihuana, más bien al contrario. Bieber intentó abrazar el mundo de la cultura, pero parece que éste le resbaló.
Anoche Justin Bieber visitó la Casa de Ana Frank, junto con sus amigos y guardaespaldas. Algunos fans esperaban a la puerta para intentar verle. Permaneció durante una hora en el museo. En nuestro libro de visitas escribió: "Muy inspirador el haber venido aquí. Ana era una gran chica. Ojalá hubiera sido una belieber". Esta noche, Bieber dará un concierto en Arnhem en Holanda.
Justin Bieber y la polémica de Anne Frank
La polémica ha sido tan grande que el museo ha tenido que salir al paso e intentar quitar hierro al asunto. En declaraciones a la BBC, una portavoz de la institución ha declarado que "tiene 19 años años y está viviendo una vida extraña. No fue muy sensible, pero no lo hizo con mala intención".
Mientras, Facebook se ha convertido en un duelo entre beliebers y atacantes: "Hasta enfrentado a una tragedia de ese tamaño, parece que sólo es capaz de pensar en él mismo", asegura un comentario. "Le adoro, pero su comentario ha sido muy idiota", reconoce una seguidora. "Al menos se ha tomado la molestia de ir. Muchos otros en su lugar no lo habían hecho", publica otra defensora.