El cantante vuelve a pisar una comisaría y no de visita. Esta vez, acusado de golpear al conductor de una limusina en la que viajaba junto a unos amigos tras ser expulsados de un club nocturno.
Todavía no ha salido de una y ya se encuentra metido en otra. Y es que Justin Bieber acudió el pasado miércoles 29 de enero a una comisaría de policía en Toronto para enfrentarse a posibles cargos acusado de atacar al conductor de su limusina.El cantante fue recibido por una gran cantidad de paparazzi, fans y curiosos que esperaban tener noticias del altercado. El abogado de Bieber explicó el motivo de la citación: "El Servicio de Policía de Toronto pidió que Justin Bieber estuviera en Toronto hoy para enfrentar una acusación de asalto en relación con un incidente el 29 de diciembre de 2013" y aseguró que el asunto será tratado como un delito menor.
Según el informe de la policía, el supuesto incidente ocurrió a finales de diciembre, cuando el conductor de la limusina recogió un grupo de seis personas que acompañaban a Justin de un club nocturno de Toronto en torno a las 3 de la madrugada. Al parecer, durante el trayecto, uno de los pasajeros tuvo una discusion con el conductor y acabó golpeándole en la cabeza. El conductor paró la limusina y se dispuso a llamar a la policía pero cuando ésta llegó el cantante ya se había marchado.
Los ciudadanos quieren que Justin Bieber sea deportado
Además, el mismo miércoles TMZ publicó que más de 100.000 personas han firmado una petición oficial pidiendo a la Casa Blanca que deporte a Justin Bieber de regreso a Canadá después de su arresto en Miami. El gobierno se compromete a revisar la petición una vez que se reciben más de 100.000 firmas en 30 días aunque el cantante consiguió esa cantidad en sólo seis días.La petición reza: "A nosotros, el pueblo de los Estados Unidos ... nos gustaría ver al peligroso, destructivo, y abusador de drogas Justin Bieber deportado. Él no sólo está amenazando la seguridad de nuestra gente, sino que también es una influencia terrible en la juventud de nuestra nación". Es poco probable que el cantante sea deportado únicamente por haber sido detenido; no obstante, es una decisión que la Casa Blanca deberá tomar.