La actriz fue vista junto a su hija Alana Thompson paseando por las calles de Nueva York. La matriarca televisiva vestía unos modernos vaqueros rotos, una camiseta ancha en color lila y una chaqueta de lana color camel, que dejaban ver el peso que ha perdido durante estos meses. A pesar del mal tiempo que rodeaba a la ciudad, la actriz se decantó por unas sandalias en color plata para completar el outfit.
La actriz quiso dar una entrevista con People, donde quiso lucir su nueva imagen mucho más delgada y estilizada. Shannon perdió más de la mitad de su peso gracias a una serie de operaciones para quitarse el exceso de piel, una dieta muy saludable y una rutina diaria de ejercicio estricta, donde se ha gastado más de 75.000 dólares.
Una etapa muy dura
Todo este proceso para mejorar su calidad de vida está siendo una fase muy complicada para la actriz, teniendo que aprender a limitar su cantidad de comida. "No voy a mentir, he vomitado porque con el baypass gástrico no se puede comer demasiada cantidad. Esto no es algo que yo recomiende a todo el mundo, hay que darse cuenta de lo que se puede hacer y lo que no", contaba en la revista People.
Como madre de dos hijas, no quiere convertirse en una imagen ejemplar para las pequeñas, tratando de que adopten un estilo de vida más saludable: "Me preocupo por la salud de Pumpkin y Alana, pero no les voy a obligar a que coman ensaladas todo el rato. Las he visto ganar y perder peso continuamente, pero nunca querría que llegaran a mis 220 kilos".