Julián Muñoz, el exalcalde de Marbella y expareja de Isabel Pantoja, pasará los últimos años de condena en libertad provisional debido a sus problemas de salud, calificados de " graves e incurables ". Según el diario El Confidencial, en un auto dictado a fecha 1 de junio de 2021, la Audiencia Nacional accedía a concederle dicha medida a pesar de no haber cumplido aún con las tres cuartas partes de condena por el caso Malaya, que suman más de 20 años de prisión.
Pero esta no es la primera vez que Julián Muñóz obtiene un dictamen de estas características. El que fue mano derecha durante años de Jesús Gil fue detenido el 17 de julio de 2006 por corrupción urbanística en Marbella y, pocos años después, le fue concedido el tercer grado penitenciario. No obstante, le fue revocado al ser condenado en una nueva causa por el caso Lorcrimar. Posteriormente, en 2018, le fue concedido de nuevo el grado penitenciario. Vivía fuera de la cárcel con una de sus hijas en un régimen de semilibertad a causa de su delicado estado de salud. No obstante, también fue revocado cuando se pudo ver al exregidor bailando en una discoteca hasta altas horas de la madrugada.
Reaparece tras un gran susto
Ya el pasado mes de abril de 2021 trascendió que Muñoz estaba ingresado en un hospital por una inflamación en la vesícula biliar que recibe el nombre de colecistitis aguda. A partir de ahora, deberá quedar sujeto al cuidado y vigilancia del familiar que designe y acepte la custodia y tiene la obligación de seguir con sus labores de voluntariado social, según indica el auto.
"Estoy contento, porque es otro estado diferente, no es lo mismo el tercer grado que la libertad condicional. Sobre todo con la edad que tiene uno, porque ya tengo 74 años y ya está uno en la cuesta abajo, esto es una gran noticia para mí y mi familia y la gente que me quiere ", ha declarado el exalcalde de Marbella, por lo que terminará la condena en libertad condicional.
El motivo por el que le ha sido otorgada la libertad condicional al ex de Isabel Pantoja tras tres intentos fallidos se debe a que el Reglamento Penitenciario permite a las personas mayores de 70 años con dolencias incurables obtener la libertad condicional sin que hayan cumplido las tres cuartas partes de la condena.