Parece que cada vez queda menos para averiguar la verdad en el caso de paternidad del valenciano Javier Sánchez Santos. El joven interpuso una demanda de paternidad contra el cantante madrileño Julio Iglesias, pero la historia viene de antes ya que su madre fue la primera en realizar una demanda civil de paternidad contra el cantante en 1992. Por su parte, Julio Iglesias no ha puesto de su lado para resolver la demanda ya que se opuso a esta y se negó a hacerse las pruebas de ADN. Además ha estado entorpeciendo los avances dentro de los cauces legales para retrasar todo lo posible el proceso.
Cuando ya se veía la luz al final del túnel, se han encontrado con un nuevo impedimento. El juez José Miguel Bort ha desestimado la petición del abogado de Javier Sanchez Santos en la que se solicitaba una prueba de ADN a los hijos del cantante. El juez ha argumentado en un comunicado que "los hijos reconocidos por el cantante no son parte del caso, ni recae sobre ellos carga alguna de someterse al procedimiento".
Pero lejos de rendirse, el letrado defensor del joven valenciano va a recurrir la decisión del juez alegando que en un procedimiento de esta categoría "la verdad material debe prevalecer por encima de otras cuestiones". Y aprovechará para recordar a los jueces que en otras ocasiones han permitido exhumar a un supuesto tío de un demandante para cotejar sus ADN. El juez valenciano José Miguel Bort ya marcó una fecha para la visita el 4 de marzo, pero que posteriormente quedó en suspenso. Actualmente parece que el juicio podría celebrarse el próximo mayo, pero todavía no hay una fecha exacta. El abogado defensor ha señalado que, aunque se hayan encontrado con algunas piedras en el camino, no impedirán que su cliente gane la demanda.
Personaje sonado
El nombre de Julio Iglesias no para de sonar en los últimos meses y es que el pasado 10 de febrero de 2019 el cantante recibió un premio Grammy honorífico a toda su carrera, pero al no asistir a la ceremonia para recibir el galardón saltaron los rumores de que podría estar en un mal estado de salud. Y parece que puede que dentro de poco su nombre también suene en los tribunales de Valencia, sentado en el banquillo.