Pocos días después de recibir el alta hospitalaria, José Ortega Cano abandonó su finca sevillana para viajar a Madrid. Será en la capital donde se someta a un nuevo tratamiento y es que el torero ha querido rodearse de los mejores especialistas.
José Fernando, un hijo modelo para Ortega Cano
El torero llegó al Hospital Ruber junto a su hijo José Fernando. Con 18 años recién cumplidos, el joven ha demostrado una madurez que a muchos ha sorprendido, el primero a Ortega Cano, que se siente muy orgulloso de su vástago. No sólo se ha hecho cargo del traslado de su padre si no que ha estado a su lado en todo momento.
Las malas lenguas señalaban que el joven sólo quería cumplir la mayoría de edad para cobrar su herencia y marcharse a su país, no sin antes hacer caja en un programa de televisión. Sin embargo las imágenes hablan por sí solas y es que en ellas se puede ver a un hijo entregado que no duda en ayudar a su padre cuando más lo necesita.
El médico del Real Madrid atiende a José Ortega Cano
Alfonso del Corral, jefe de los servicios médicos del Real Madrid, será quien se ocupe de la rehabilitación del torero. Aprovechando que el equipo blanco está de gira, el médico puede dedicarse por completo al torero. Ortega Cano confía en este facultativo ya que le conoce desde hace tiempo y le ha tratado en otras lesiones.
Tras abandonar el hospital, el torero y su hijo se trasladaron a la casa donde hasta hace unos años vivía su madre. Allí vivirán una larga temporada ya que la recuperación del torero será larga y difícil. A los pocos minutos de su llegada, la casa comenzó a llenarse de gente. Sus hermanos fueron llegando poco a poco ya que quería ver como se había instalado en la casa el torero y como había ido su primer día de rehabilitación.