El cordobés no parecía muy contento con esta nueva Ley por lo que ha querido decir lo que piensa en Twitter: "Pues yo diría que un 'no' puede ser un 'no' o puede ser un 'ya veremos' o un 'cúrratelo un poco más chaval'. Es más, si un 'no' fuera siempre un 'no', muchos no hubiéramos venido al mundo porque la seducción es un juego donde no conviene enseñar las cartas desde el principio", escribió el cantante.
Lejos de ser esto lo único que dijo, también arremetió directamente contra Irene Montero: "Si quien legisla es alguien que solo entiende el sexo como un aquí te pillo, aquí te mato y confunde la seducción con la sedición o la sedación, no sabe lo que es ninguna de estas tres cosas", añadió.
Como era de esperar, muchos usuarios de Twitter se echaron las manos a la cabeza con lo que había dicho Soto y le dejaron bastante claro como funcionaba la sociedad actualmente: "Si te dicen 'no', es porque es un 'no', porque no hay interés, no es muy difícil ¿O tu cerebro no puede procesar eso? El consentimiento es esencial para mantener relaciones sexuales. En el caso de que no haya consentimiento es violación", le respondió.
José Manuel Soto sigue reafirmándose
Aunque para cualquier persona la cantidad tan exagerada de comentarios negativos sobre sus palabras habría sido suficiente para al menos no volver a hablar del tema, el cantante parecía que no haber tenido suficiente y continuó opinando sobre el tema haciendo referencia a un poema de Lope de Vega: "Al poeta seguro que le dijeron muchas veces 'no'. Si le hubieran dicho siempre que 'sí', no habría sufrido en el amor y no nos habría dejado maravillas como esta. El 'no' es lo que mantiene viva la llama, a ver si nos enteramos", seguía insistiendo el cantante.
Pero como esto no parecía suficiente para el cordobés, terminó su discurso elogiando un vídeo del grupo parlamentario Vox en el que varias mujeres criticaban el "feminismo supremacista": "Llamadme facha, pero a mí estas señoras y este mensaje me representan. Para defender la igualdad y la dignidad de las mujeres no hace falta el denigrante mensaje del feminismo radical", escribió.