La justicia australiana se toma muy en serio sus normas y no pasa por alto que alguien las incumpla, aunque sea el mismísimo Johnny Depp. El actor se ha visto envuelto en una polémica causada por un problema con sus perros.
Al parecer, el actor de 'Piratas del Caribe', que está rodando la cuarta entrega de la película en Australia, pasó por alto el control de animales del continente, no registrando a sus dos perros yorkshire Boo y Pistol. Lo que ocasionó que no pasaran la cuarentena obligatoria de 10 a 15 días.
Cuando las autoridades australianas se enteraron, pusieron el grito en el cielo y llamaron desde el Senado a Depp para que se marchara inmediatamente, bajo amenaza de sacrificar a los caninos. Ante el peligro que corrían sus perros, les hizo caso.
Reacciones a favor de Depp
No obstante, el Senado no creyó que el escarmiento fuera lo suficientemente duro, por lo que sentenciaron que el actor debería pasar 10 años en prisión o enfrentarse a una multa de 275.000 dólares. Habrá que ver en qué queda la cosa.