Joaquín Cortés ha reaparecido con un aspecto estupendo a las puertas del hospital donde ha permanecido ingresado durante más de siete días y se ha mostrado visiblemente recuperado tras todo este tiempo de ingreso. Con gafas de sol, chaqueta de cuero y una sonrisa contenida, el bailaor se paraba ante las cámaras acompañado por su mujer, que le cogía del brazo con fuerza demostrando que es su gran apoyo.
Ha llamado la atención este alta pues él mismo ha contado en una publicación horas antes todo lo que le estaban haciendo: "ECG (electrocardiograma) hecho! EEG (electroencefalograma) hecho, capacidad pulmonar medida y así sin parar. Seguimos ingresados pero cada día más animado, aunque con algún sustillo en el camino (...) Yo recuperándome cada día. Aún con oxígeno. Y sin síncopes salvo un amago hace una noche. Aún sin diagnóstico claro a parte de una grave neumonía. Pero no provocada por ningún virus de nada como comentáis por aquí, si no por una bacteria".
Un gran susto
Sin duda, este problema de salud ha supuesto un gran susto para toda la familia que no comprendía qué era lo que estaba pasando. Él mismo ha dicho que es incombustible y que estuvo dándolo todo hasta el último momento, motivo que le llevó de cabeza al hospital, donde ha permanecido ingresado durante más de una larga semana. Ahora, por sorpresa, ha recibido el alta pero deberá continuar con las pruebas como él mismo ha explicado en su última publicación.