Joaquín Cortés y Mónica Moreno no pueden estar más felices después de que se hayan convertido en padres por segunda vez, dando la bienvenida a su hijo en la Clínica San José de Madrid. Los dos, tanto la mamá como el bebé, se encuentran en perfecto estado y se espera que muy pronto reciban el alta hospitalaria.
Este nacimiento se ha producido poco más de dos años después de que llegara al mundo su primer hijo, un niño al que llamaron Romeo nacido el 20 de octubre de 2018 que consiguió llenar la casa de la pareja de felicidad. Con esta llegada sellan su amor que surgió diez años atrás. Sus hijos se han convertido en los completos protagonistas de sus vidas y no pueden alegrarse más por la familia que han construido.
Poco antes de que se produjera el nacimiento la psicóloga escribía en su cuenta de Instagram la siguiente reflexión: " Tendrás otro ser maravilloso en tu vida, alguien que si Dios quiere te querrá, cuidará y te acompañará toda tu vida... como le pasa a mami con sus hermanitos. Yo siempre he dado gracias de tener hermanos, a pesar de peleas, enfados o mil problemas que hayan podido surgir... ¿Y sabes por qué? Porque es un amor incondicional el que se crea ", decía junto a unas preciosas imágenes en las que aparece con su hijo Romeo en una bañera.
En estas situaciones además de tener mucha ilusión se tiene miedo, porque Mónica Moreno no sabía cómo iba a organizarse, pero en estos casos todo surge solo y con naturalidad. Con motivo del día de San Valentín la pareja dejaba claro que estaban contando los días para recibir al pequeño de la casa y Joaquín Cortés escribía: "¡MI VIDA!", junto a una imagen en la que aparecía su familia.
Una noticia que les llenó de felicidad
Fue en diciembre de 2020 cuando anunciaron que volverían a ser padres por segunda vez después de que circularan numerosos rumores. " Un nuevo miembro en la familia que le acompañará el resto de su vida", expresó el bailaor a través de las redes sociales. Pese a que los dos se han caracterizado por ser discretos con su vida privada, ahora no han podido esconder su felicidad.