Después de regresar a España, ambas convertidas en iconos del movimiento LGTB encontraron trabajo. Las dos protagonizaron la portada de la revista Interviú y Jimena, en concreto, fue contratada en un conocido club de Marbella. Sin embargo, tras esto ambas se encuentran sin trabajo y atraviesan una difícil situación económica. Tanto es así, que la pareja vive gracias a los padres de Jimena que las mantienen y les han dado alojamiento en su casa de Torrox, en Málaga.
Jimena es esperanzadora y como ha relatado a Crónica: "Estoy buscando trabajo, seguro que me sale algo". Una situación que ha conseguido que las jóvenes estén más unidas que nunca y están dispuestas a todo. De hecho, la pareja ha cedido los derechos de su historia de amor a una productora y tienen pensado establecer su residencia en Madrid.
Un amor a prueba de todo
Su historia de amor comenzó a principios de 2016 momento en el que empezaron a chatear en Tinder y poco tiempo después iniciaron su relación. Después de recorrer varios países huyendo del padre de la egipcia, las jóvenes han conseguido que su amor triunfe. Una huída que hizo a las jóvenes atravesar Georgia o Estambul donde fueron encarceladas y acusadas de terrorismo. Sin embargo, este problema es uno más en su lucha por permanecer juntas y no ha hecho que éstas se rindan.