La modelo ha dado algunos detalles sobre cómo está viviendo la tercera maternidad, después de haber dado la bienvenida al pequeño Alejandro.
El 12 de julio Jessica Bueno y Jota Peleteiro ampliaron la familia dando la bienvenida a su segundo hijo en común llamado Alejandro. Para ella ha sido su tercer bebé, ya que se estrenó en la maternidad junto a Kiko Rivera. Tal y como ella misma ha contado, el pequeño Alejandro nació por cesárea, un parto diferente a los anteriores, y aunque en un principio estaba un poco asustada, fue todo bien.
"Creo que con el malestar normal. La 'herida' está curando bien", ha dicho la modelo al respecto, y ha contado algunos detalles después de que haya contestado a las preguntas de algunos seguidores en su cuenta de Instagram, hablando tanto de ella como de su hijo. "Pesó 3,890 kilos y midió 54 centímetros", dijo, y además adelantó cómo fue el momento del parto: "En el quirófano me faltó mi marido y sentirme acompañada por él, pero no pudo entrar. Lo entendimos, ya que se trata de una operación".Por otro lado, ha contado que el momento de 'piel con piel' no lo hizo ella, sino Jota Peleteiro: "No puedes hacerlo al momento porque, cuando nace el bebé, aún tienes que estar como una media hora más para que te cosan y demás, pero después de cortar el cordón y limpiarle un poco te lo lo acercan para verle. Me lo arrimaron a mi cara y pude sentirle y besarle. A mí me dieron a elegir antes de entrar en el quirófano entre tenerle allí a mi lado en una cunita o que hiciera piel con piel con su papá, y decidí que esa era la mejor opción. Así que Alejandro pudo estar con mi marido haciendo piel con piel hasta que terminaron conmigo".
Además ha contado que la cesárea no estaba programada, sino que fue algo que decidió sobre la marcha por las circunstancias dadas: "No ha sido programado, pero Alejandro no terminaba de encajarse y, después de varias horas de parto con la bolsa rota, aún no se había borrado el cuello del útero. Me preguntaron si prefería seguir esperando o iniciar la cesárea y elegí la segunda opción porque me daba miedo que al final tuviese que ser corriendo"Así es su recuperación
Y ha sido en ese momento cuando ha confesado que para ella ha sido el parto más complicado: "Ha sido el más difícil. Los dos anteriores fueron partos vaginales sin ninguna complicación: con el primero solo tres puntos y con el segundo un punto. Los puntos no duelen. Una vez que estás en casa, solo tienes que curar una vez al día y están bien protegidos. Solo pasas un día o dos peor, pero luego la recuperación es muy buena. Tienes que caminar, cuanto más activa estés antes te recuperas".