"Finalizaron los papeles del divorcio con ella hace un mes, pero están esperando el momento adecuado para entregarlos", dijo una fuente cercana a la pareja a Daily Mail. Ahora, parece que ese momento ha llegado y es que según TMZ, Jennifer Lopez solicitó el divorcio este martes 20 de agosto de 2024 ante el Tribunal Superior del condado de Los Ángeles por ella misma, es decir, sin mediación de ningún abogado. Sin duda es una fecha que no pasa desapercibida, ya que este 20 de agosto de 2024 hubiera sido el segundo aniversario de la ceremonia nupcial que celebraron en Georgia para darse de nuevo el 'sí, quiero', tras su boda sorpresa en julio de 2022 en Las Vegas.
Sin embargo, no es la fecha oficial de ruptura, ya que, según TMZ, en el documento legal, Jennifer Lopez estableció el 26 de abril de 2024 como la fecha de separación. Se trata de una semana y unos días antes de la Met Gala 2024 en el Museo Metropolitano, donde la cantante ya acudió en solitario y despertó los rumores sobre su matrimonio, ya que el último evento público en el que se les vio juntos fue un partido de Los Ángeles Lakers el 16 de marzo de 2024.
No hay acuerdo económico
Además, según el portal, Jennifer Lopez ha presentado la solicitud sin tener resuelto los términos económicos. Los dos miembros del matrimonio han estado intentado llegar a un acuerdo y todavía siguen intentándolo a través de unas conversaciones que cada vez se han vuelto más incómodas.
También cabe destacar que Jennifer Lopez renunció a la manutención conyugal y pide al juez que también se le niegue la manutención a Ben Affleck. De esta manera, el romance que se reavivó en 2021, tras su primera separación en 2004, queda totalmente roto y en busca de acuerdos económicos. No obstante, al no haber tenido hijos en común, no será necesario hablar de la custodia.
Hacen vidas separadas
Ambos pusieron en venta su casa conyugal en Beverly Hills y Ben se compró su propia casa en Brentwood, mientras que Jennifer Lopez está buscando una nueva. De hecho, la cantante ha pasado este verano en Los Hampton, en Nueva York, donde celebró su 55 cumpleaños de temática 'Bridgerton', en el que no se vio a su marido.