Jennifer Lawrence admitía, en unas sorprendentes declaraciones a The Hollywood Reporter, que había necesitado beber alguna que otra copa para ser capaz de soportar la grabación de una íntima escena con su compañero de reparto en 'Passengers', Chris Pratt. Sintiéndose muy nerviosa y culpable por la filmación de su primera escena de sexo con un hombre casado, la ganadora del Óscar revelaba haberse emborrachado bastante cuando llegó a su casa.
" Me sentía muy culpable. No paraba de pensar en qué había hecho", decía. A la joven actriz parece que le afectó sobremanera el hecho de que su compañero estuviera casado: "La culpa es la peor sensación que se puede tener en el estómago", asegura. A pesar de saber que era su trabajo, Lawrence quiso incluso llamar a su madre y preguntarle si había hecho bien.
También reveló lo terriblemente difícil que había sido estar pendiente de hacer la escena lo más realista posible y luchar contra la voz de su conciencia que no paraba de repetirle una y otra vez que estaba haciendo algo indebido con un hombre casado.
Su proyecto juntos
'Passengers', protagonizada por Chris Pratt y Jennifer Lawrence, se estrenará en Estados Unidos en diciembre de 2016 y todavía de desconoce la fecha en España. La película cuenta las aventuras de una pareja que encuentra el amor en una nave espacial que viaja a una lejana colonia de humanos. Habrá que esperar, seguramente, algo más de un año para ver el resultado de tan polémica escena.